Decorar el dormitorio de nuestros hijos no es tarea sencilla. Debemos tener en cuenta sus hábitos (o los hábitos que quisiéramos enseñarles), sus juegos y actividades favoritas, colores y texturas.
Sin dejar de lado una realidad inamovible: crecerán; y sus necesidades cambiarán constantemente en función de su desarrollo.
Es por eso, que creo que es una de las estancias más importantes de la casa y a la que debemos dedicarle especial atención.
En mi caso, de mis espacios favoritos para decorar. Me encanta conocer cómo es el día a día de los más pequeños de la casa ( a veces no tan pequeños) y asesorar a sus padres en cuanto a texturas, textiles, muebles, pisos, luminarias, etc etc
En casa, esos cambios empiezan a reclamar una transformación. El lila está dejando de ser el protagonista para comenzar a crear una paleta de color más abierta, con detalles brillantes, áreas de ejercitación y baile, lectura y juegos.
¿Cómo es posible fusionar todo eso en unos pocos metros cuadrados? Pues es posible, les aseguro. Sólo se necesita de un buen diseño.
Qué tengan un hermoso día!
Ana
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